Powell, Spanoulis, Kirilenko y Menchov

- Asafa Powell es sinónimo de talento. De talento muchas veces desaprovechado. Como en la final de 100 en Osaka, donde Gay le barrió literalmente, le quiso enseñar cómo se tomaba un café mientras el bueno de Asafa se esforzaba por ser segundo. Duro golpe para el jamaicano. Pero días después, en un relevo magistral vencido por los americanos, Powell se recuperó. Gay prefirió evitar el duelo directo, hizo una de las primeras postas, y dejó a sus compañeros con el oro en la mano. Ahora, el café se le atragantó al tricampeón mundial cuando vio que Powell hizo una última posta en 8:70 (lanzado), pasando a Jamaica de la quinta a la segunda y respirando la nuca de los compañeros de Gay. Hoy, en Rietti, Powell ha demostrado que con la cabeza bien puesta es capaz de batir el récord más glamouroso posible. 9:74, y sin despeinarse. Y en semifinales. Quizás la clave de Asafa.

- Spanoulis es un jugador diferente. De esta Grecia que hoy ha medio despertado ante Croacia, destacan pocos y asombran todos. Pero ni Papaloukas ni Spanoulis, ni Diamantidis habían demostrado su verdadero nivel. Hoy, el de Panathinaikos ha despertado con 23 puntos. Papaloukas ha aparecido cuando se le ha pedido. Pero Spanoulis....Spanoulis ha sabido actuar. Ha hecho falta cuando España no la hizo. Se ha quedado la última posesión, con 6 segundos. Ha corrido, ha driblado, ha roto a Planinic, y se ha clavado un triple sobre la bocina para ganar el partido. Para volver a meter a Grecia en el campeonato. Los viejos zorros han despertado. Van Gundy....tienes a T-Mac...peor también mucho pufo. Y Spanoulis es tío NBA.

- Va a empezar el España-Rusia, y le tengo miedo a AK-47. Un tío frío, que ha tenido una temporada NBA malísima, con problemas con Sloan. Peor que Okur, que Boozer, que Derome Williams....pero en el Europeo ha sacado su repertorio. Ayudando en el rebote, metiendo sus 20 puntitos, intimidando, robando, defendiendo, atacando. Un jugador total. Jímenez...empieza a defender.

- Menchov tiene la Vuelta más aburrida del siglo en el bolsillo. Qué coñazo. Nadie tiene fuerzas y eso que ya no hay etapas duras duras. ¿Será que el doping ha desaparecido?