28 de junio de 2008

Soñando en el preludio de la emoción

Ritmo cardiaco: normal
Riego sanguineo: normal (bueno, y el cerebro como siempre)
Temperatura corporal: normal

Dentro de 29 horas, nada será normal. Las calles se vaciarán, al menos aquellos lugares que no tengan un televisor en un radio de 10 metros. Los bares se llenarán, algo que en España tampoco es muy atípico. El país será una República (todos los miembros de la Familia Real viajan a Viena), nadie comerá salchichas y todos iremos de rojo. Esa es la esencia del domingo 29 de junio de 2008, el día en que España volverá a jugar la final de una Eurocopa ante Alemania. 24 años después, y ojo, que algunos ni estábamos pensados todavía, el país podrá volver a sacar su bandera con orgullo, aunque perdamos. Porque la esencia del fútbol de España ya ha obtenido premio y al fin y al cabo, es lo que se esperaba.



Hasta que Rosetti no de el silbato inicial, soñaremos con que Ballack sufra una gastroenteritis por ingestión de papillas, que a Angela Merkel no se le ocurra hablar con Scweinsteiger, que la costilla de Frings no sea como la de Adán, que los abuelos de Mario Gómez no pongan la tele, pero sobre todo, soñaremos con ese portero nacionalizado (español) llamado Jehns Lehmann. Chaval (y no tanto), si sigues como hasta ahora, te pagamos unas vacaciones en Mallorca. Almunia no contribuye por residir en el extrangero.

Soñaremos con que Xavi la coja y la abra para Iniesta, que traza una diagonal y se la pone en el pie a Silva. El de Arguineguín dribla a Friedrich y le tira un caño a Mertesacker. Entonces ve como llega Senna desde atrás se la pone y desde la frontal Marquitos chuta flojo a puerta, pero Lehman ya estaba en Mallorca. ¿Y Torres? Torres se toca el pelo repetidas ocasiones y cuando el equipo ya está defendiendo el saque de centro, lo celebra. Soñemos. Vivamos. Riamos. Bebamos. Paguemos.

25 de junio de 2008

Tiempo de héroes

Una competición tan corta como una Eurocopa sirve para varias cosas. Los clubes, por ejemplo, luchan por distintas vías. Unos pretenden que sus estrellas se salgan, se revalorizen y puedan ser vendidas a coste del mercado actual, ese que cambia a diario y dependiendo de las motivaciones de los compradores. Otros pretenden lo contrario, pues saben que son jugadores de suprema necesidad y que si triunfan, no podrán competir con grandes clubes, con lo cual, la suprema necesidad quedará vacía.



Pero si algo tiene la Eurocopa, amén de fomentar el orgullo (o la desesperación nacional) es que encumbra héroes y también villanos. Que se lo digan a Ricardo, que hace 2 años abandonó sus guantes y metió a Portugal en semifinales echando del torneo a Inglaterra. Hace una semana, Portugal cayó con un Ricardo fallón que no pudo evitar las embestidas alemanas y más bien las ayudó. Por cierto, que poco evoluciona la portería portuguesa para que este tipo siga ahí. Que dejen de sacar extremitos.



Esta noche será tiempo de volver a elevar a un individuo, o eso se espera. Si fuera por trayectoria, en Turquía tendría más papeletas Semih Senturk, quien ya lleva dos goles en los minutos mortales. Pero dada la situación del conjunto otomano, héroes serían todos, desde Rustu, hasta los que no están pasando por el ya famoso Tolga. Si pasan los turcos, Fatih Terim, ese ogro para la prensa local, debería ser rebautizado, renacionalizado y nombrado Presidente. Por lo menos.

Más papeletas tiene Alemania. En parte, Alemania también se ha reinventado durante el campeonato, aunque más por devoción (necesaria también) que por obligación. Jansen le dejó su sitio a Friedrich, Rolfes y Hitzlsperger irrumpieron, Gómez se fue y dejó sitio a Schweinsteiger. Aunque Frings parece recuperado y Fritz no fue de lo más nefasto cuando jugó, este equipo ha eliminado a Portugal, y ya es esto suficiente aval como para poner en entredicho los propósitos de Low. No ha habido héroes en los alemanes, porque en los alemanes nunca hay héroes. Sin embargo, Ballack es el buque insignia indiscutible y Podolski está en un estado de gracia que obliga a creer en él. Tanto como en los turcos. El reciente pasado nos da la posibilidad de creer. Como en España.

22 de junio de 2008

Repaso

Saludo a mis amigos bloggeros para anunciar que ya he vuelto del desfase de Salou, esa 4ª provincia de Aragón, y que el jueves me enteré de que tengo un 8 de media al acabar Bachiller y Selectividad, lo cual no está nada mal.

De paso, como ya dije, quiero relanzar el blog aunque el verano no sea la época más propicia para lograr el objetivo. Pretendo escribir a diario de cualquier cosa relacionada con el deporte, y espero que los que siempre se interesaron por este sitio lo sigan haciendo.



La última semana ha sido muy consistente. Por empezar con una alegría, el domingo la S.D.Huesca logró el ascenso a Segunda División tras empatar a 1 en la vuelta de la eliminatoria que le enfrentaba al Écija. Algo, o más bien mucho, se está haciendo bien, o mejor muy bien, en Huesca. Tiene un buen conjunto de asesores, un equipo humano que trabaja en la Secretaría Técnica (Raúl Ojeda a la cabeza) de forma maravillosa. Es más, el ascenso ha logrado que jugadores de cierto nivel que abandonaron Huesca este verano, como Juanjo Camacho o Rubén Falcón, quieran volver al Alcoraz. El modelo del Huesca es interesantísimo, por el hecho de contar con muchos jugadores aragoneses. Y si lo que se dice es cierto, van a ser más. Los refuerzos del Huesca, los dos primeros concretamente, pueden ser Victor Bravo, aquél interior que debutó con Atlético hace dos años y Rubén García, un zaragozano que ha estado en Lleida los últimos años.

En cuanto al Zaragoza, no dejan de salir nombres, pero ninguno se confirma. La lista: Angelleri, Abraham, Colunga, Diego Castro, Uche, Hidalgo, Sergio Asenjo y tantos y tantos otros. La clave: presupuesto de 35 millones en Segunda. Presupuesto de 2.5 millones, en Segunda también. Al año que viene derbi aragonés.

Pero lo que más importa estos días es la Eurocopa. España se enfrenta esta noche a su historia y a la de Italia, a su mal fario y a la roña transalpina. No queda otra que pensar, una vez más, en que esta vez sí, en que esta vez va a cambiar. Ganar depende del juego y de la mentalidad y a los italianos les sobra lo segundo. Es cuestión de que el juego se imponga, de que España sepa dominarlo y ponerse por delante. Y a partir de ahí, a ganar. Es lo que se espera.

Ayer Rusia dejó constancia de que el fútbol del Este también evoluciona. El letal Arshavin, quien anunció esta temporada todo de lo que era capaz mató a una Holanda que pareció España a lo largo del torneo: mucho juego, mucho toque, pero en la grande, catapún.

Alemania también había pasado con su balón parado y su particular estrella, el cuasipolaco Lukas Podolski. Es cuestión de detalles y a Portugal le faltó el máximo: hay que llegar al área para poder ganar un partido, y Portugal sólo lo hizo un par de ocasiones. No las iba a parar Lehman, obviamente.

Entre medio, la gran Croacia resucitada se vio sacudida por los finales letales de una Turquía que tiene mucha sangre, pero también muchas bajas para semifinales. Son los alemanes los favorecidos, como siempre. Habrá que confiar en que Nihat o Semih Senturk vuelvan a demostrar que Turquía está de moda no sólo en la cantera.




P.D: Mi pronóstico para hoy es victoria española, con lo cual os podeis llevar las amnos a la cabeza. Acordaos, vamos a ganar la Eurocopa.