Los cuartos de final de la Copa América apenas han tenido historia al margen de la aparición (nuevamente) del talento mexicano Nery Castillo, de una nueva demostración de Juan Román Riquelme, de la aparición de un Forlán fallón o la resurrección de Brasil ante una resacosa (literal) Chile.

Y es que México se ahogaba en las penumbras tras el Mundial y se encontraba en terreno pantanoso tras su derrota ante EE.UU en la Copa Oro. Debía aparecer alguien y todos sabemos que en el banquillo no estaba, aunque algo mejoraba a La Volpe. Y apareció. Llegado desde la Magna Grecia y envuelto en una polémica habitual por su posible internacionalidad, Nery Castillo ha devuelto la ilusión a una México que está siendo lo mejor del torneo. Con dos guardametas espectaculares, entre los cuales me quedo con Oswaldo Sánchez, una defensa sólida y Nery y sus amigos arriba, México camina sobre suelo firme y divisa en el horizonte a su rival de siempre, Argentina.

Los de Basile se encontraron un "coco" (valga el chiste fácil) en Perú, aunque resolvieron conforme mandan los cánones en la segunda mitad. Y es que Basile resolvió el problema dando entradaa Carlos Tévez por Diego Milito, y así darle una dimensión más dinámica al juego y hacer correr a la numerosa defensa peruana. El primero lo marcó Román, que como en la Libertadores se vistió de crack al dar el pase del segundo a Leo Messi y marcar el cuarto. Entre medio el Jefecito, acostumbrado en esta Cop a marcar goles puso el definitivo 4-0. Duelo por todo lo alto ante Nery y otros 10.

Y además despertó Brasil ante una melancólica Chile. Más que melancólica, resacosa. Los chilenos disfrutaron de su pase a cuartos en su hotel, y en su país disfrutarán de los palos que ahora van a recibir. Y no por la derrota ante una selección disfrazada de Brasil, sino más bien por un acto de indisciplina y de falta de respeto al escudo que llevan en la camiseta. Y es que tampoco fue una victoria normal. 6 chicharros encajaron los chilenos, con Robinho, Baptista y Vagner Love (un partido bueno de cada 50) de protagonistas absolutos.

Y en el otro choque fueron los charrúas quienes impusieron la lógica ante la Vinottinto. Tan amigos habían acabado en la fase de grupos, donde el empate les valía, que se encargaron los celestes de eliminar dicha amistad al sonido del pitido inicial. Llegadas por todos lados, ocasiones marradas por Forlán (definitivamente, éste ya es del Atleti). Hasta que Pablo García puso el 1-2 no hubo respiro ni desolación para los locales. Finalmente Forlán sentenció, y Uruguay ya mira a Brasil....con todo lo que ello conlleva.

P.D: Como en el anterior post, blogger no me permite pasar el cursor en la zona del título. El título de este post era "Nery, el son de un corrido, amenaza a Román". Por cierto, que este post se publicará también en http://www.masquefutbol.com/