Pongámosle pausa

El otro día leía a Piterino, quien escribía acerca de el manejo de los tiempos en el fútbol. Se refería al caso del joven Bojan Krkic. Yo quiero darle otro enfoque a esto de los tiempos. Todo va a una velocidad tan suprema, que nos olvidamos de las bases del fútbol en sus inicios. La vorágine del fútbol olvida a los fósiles que crearon, a su estilo, el fútbol que hoy nosotros disfrutamos.

Igual que cuando encendemos una lámpara nos acordamos de Edison o igual que un domingo por la tarde enchufamos el Carrusel y nos acordamos de Marconi, sería adecuado recordar quiénes fueron los precursores de este deporte, qué utensilios utilizaban y cómo ha cambiado el deporte de ayer a hoy. Sin embargo, la velocidad de nuestras vidas, la cual apenas da respiro para tomarse una pausa, como para mirar atrás, no nos deja homenajear a todos los antepasados que permitieron que el espectáculo y el glamour que hoy rodean al fútbol fueran posibles (aunque quizás no llevaban esa intención).

El fútbol ha cambiado a un ritmo espeluznante. Ayer tuve la oportunidad de ver como el Zaragoza F.C., a sus 3 años de edas, todavía usaba en los entrenamientos las camisetas del Iberia, pues no tenían presupuesto para comprar unas nuevas. Uno se imagina a Beckham entrenando con una camiseta de hace 3 años, y no puede parar de reírse, hasta que alguien le detiene y le dice que ese es el verdadero fútbol. Igual de triste es que únicamente por los mayores, podamos recordar a jugadores como Puskas, Di Stefano o Kubala. El tiempo no nos permite ver sus partidos, porque si no, nos perderíamos uno actual. Y merece más la pena ver el nuevo look de Beckham o las botas nuevas de Jesús Navas antes que 22 hombres merendados por el barro.

Por otro lado, resulta injusto las glorificaciones e idolatraciones que se realizan hacia genios del fútbol moderno, sin pensar que quizás hace 50, 60 o 70 años, había futbolistas igual de maravillosos. Pero claro...como nadie los ha podido ver, y a quien lo ha hecho nadie le hace caso....¿Quién soy yo para dudar de la calidad del genio Zidane? Pero igualmente, ¿quien soy yo para decir que no hubo uno en su tiempo mejor que él? Sería algo similar a lo que sucede en la actualidad, pero en un intervalo de tiempo mayor. Hoy en día, quien ayer es héroe hoy es villano (miren a Luis César en el Nástic). Pues igual, quien hace 60 años firmaba autógrafos y se batía en los sucios barrizales de toda España con la careta de crack, ahora, ya sea desde la lápida o desde un banco del parque, tiene que observar, asombrado, cómo el fútbol ha evolucionado (a peor) y cómo ya nadie le recuerda. Triste pero real.

P.D: Os informo que la sección Top 15 goles volverá la próxima semana, ya que Shrek se encontraba enfermo esta semana.